El Gobierno lanza un plan para explotar las 'tierras raras' de España sin presupuesto y con las competencias mineras transferidas a las CCAA

El Gobierno mueve ficha en la pelea mundial por las 'tierras raras' que enfrenta a China, Estados Unidos y Europa. El Ministerio para la Transición Ecológica ha lanzado un plan de acción con 38 medidas para resucitar la minería y promover la explotación de aquellas materias primas presentes en nuestro país que figuren entre las 34 que Bruselas ha calificado de "fundamentales". El plan es ambicioso, de hecho, fuentes ministeriales indican que no hay precedentes de una iniciativa semejante a nivel nacional desde el inicio de la democracia. El problema es que ni cuenta con un presupuesto claro ni depende enteramente del Gobierno, pues las competencias en materia minera están transferidas a las autonomías.

El Gobierno mueve ficha en la pelea mundial por las 'tierras raras' que enfrenta a China, Estados Unidos y Europa. El Ministerio para la Transición Ecológica ha lanzado un plan de acción con 38 medidas para resucitar la minería y promover la explotación de aquellas materias primas presentes en nuestro país que figuren entre las 34 que Bruselas ha calificado de "fundamentales". El plan es ambicioso, de hecho, fuentes ministeriales indican que no hay precedentes de una iniciativa semejante a nivel nacional desde el inicio de la democracia. El problema es que ni cuenta con un presupuesto claro ni depende enteramente del Gobierno, pues las competencias en materia minera están transferidas a las autonomías.

Debido a la ausencia de Presupuestos Generales, el ministerio que dirige Sara Aagesen no se ha atrevido a asignar partidas concretas para casi ninguno de los puntos incluidos en el plan, pese a que la aplicación de muchos de ellos será inmediata. El paquete de medidas, que hoy arranca su trámite de audiencia pública, cubre el periodo 2025-2029. Es, por tanto, el primer paso de la Hoja de Ruta de la gestión sostenible de materias primas minerales, un documento que el Ejecutivo aprobó en 2022 y cuyo desarrollo quedó en standby a la espera de conocer el citado reglamento de Bruselas. Una vez conocido el marco europeo, el ministerio ha vuelto a la carga.

El reciente plan de acción, que previsiblemente estará operativo a finales de mayo, se enfrenta a una segunda incógnita: las CCAA. Son estas las encargadas de tramitar los proyectos mineros que se plantean en sus territorios y, por tanto, las que marcan los plazos. También son los gobiernos regionales los que, eventualmente, pueden frenar a los promotores.

En territorios como Galicia, donde la contestación social y la judicialización de proyectos se ha convertido en la norma, la necesidad del siempre complicado (y poco explorado) modelo de cogobernanza adquirirá una relevancia especial. En todo el territorio nacional se ha extendido una creciente reticencia social a cualquier actividad de exploración, algo de lo que son conscientes en el ministerio.

Con todo, la vista de Transición Ecológica está fija en el oeste del país, en la llamada franja pirítica que enlaza Galicia con Andalucía, pasando por Castilla y León y Extremadura en la frontera con Portugal. En cualquier lugar donde existan indicios de materias primas estratégicas, el Gobierno podrá imponer sondeos y, si las autoridades autonómicas o locales ofrecen resistencia, bastará con alegar el interés estratégico para el país. "Los recursos mineros son bienes de recurso público estatal", afirman desde el ministerio, donde recuerdan que la normativa nacional ya prevé la figura de "reserva a favor del Estado", otra herramienta con la que contaría el Gobierno en caso de choque.

Fuentes del ministerio trasladan, además, que muchos de los proyectos mineros planteados en España ya se están dirigiendo a Europa. "Si las autoridades comunitarias los califican de estratégicos, las autonomías estarían obligadas a tramitarlos de forma preferente", puntualizan. Es decir, a decidir los permisos pertinentes en un plazo de 27 meses. Por ahora, solo las iniciativas que sean elegidas por Bruselas contarán con este trato preferente.

Quizá la novedad más relevante que introducirá el nuevo plan de acción es la aprobación de una nueva Ley de Minas. La actual data de 1973 y, aunque fuentes del ministerio explican que es un marco "muy técnico que ha funcionado muy bien", aseveran que conviene modificarlo para adaptarlo a los nuevos intereses estratégicos. Esto es, cambiar el carbón y el uranio por el wolframio, el litio, el cobalto o las llamadas 'tierras raras'. Es decir, materias primas esenciales para sectores estratégicos como el tecnológico o las energías renovables.

El ejemplo de Terra Mítica

El plan prevé una estrecha colaboración público-empresarial que incluye, por ejemplo, la financiación por parte del Estado de determinadas investigaciones privadas, a cambio de que las empresas promotoras compartan después los resultados con la Administración. Uno de los primeros pasos será el de hacer una potente labor deinventario. El ministerio quiere saber exactamente qué volumen de estas materias primas demandan realmente los distintos sectores y qué potencial tiene España para abastecerlo.

Además, se hará un análisis para conocer dónde y cuántos huecos mineros hay dispersos por el territorio nacional. Se trata de espacios afectados por la actividad minera que fueron abandonados una vez que concluyó la actividad de exploración. El ministerio quiere encontrarlos y ponerlos en valor, siguiendo la estela del parque de atracciones Terra Mítica en Benidorm, que fue levantado en una antigua cantera.

De todo ello saldrá un nuevo mapa del potencial minero nacional. "Los resultados no serán inmediatos y se revisarán cada cinco años", puntualizan desde la cartera. El Gobierno prevé desplegar una potente campaña publicitaria que mejore la imagen pública de la actividad minera, un sector que la propia agenda política del Ejecutivo de Pedro Sánchez ha mantenido en el ostracismo.

Un mensaje en el que va a incidir el Gobierno es en el impacto económico de la minería. "Por cada euro de investigación hay un efecto de arrastre de 992 euros en minería, y cada empleo en investigación genera 128 empleos más", destacan desde la cartera. El Gobierno pondrá también el foco en el ámbito académico para tratar de recuperar el interés por las carreras vinculadas a la minería, en aras de asegurar suficientes profesionales para la futura demanda que se prevé desde la Administración.

Veto al uranio y los hidrocarburos

Los datos que maneja el ministerio, procedentes de organismos internacionales, pronostican un ingente aumento de la demanda mundial de minerales y metales. Solo para el despliegue de renovables serán necesarias 3.000 millones de toneladas. En este contexto, la cartera descuenta que habrá un aumento de proyectos de exploración en nuestro país, si bien asegura que "la superficie afectada por la minería disminuirá en un futuro basado en renovables en comparación con otro basado en combustibles fósiles".

El resurgir minero que proyecta el Gobierno mantiene, sin embargo, las líneas rojas que fijó en su día la Ley del Clima impulsada por Teresa Ribera. Es decir, el fracking (extracción de petróleo y gas submarino) y los nuevos yacimientos de uranio seguirán estando vetados en nuestro país.

¿Qué son las 'tierras raras'?

• Son 17 elementos químicos escasos y muy concentrados que son esenciales para industrias como la tecnológica o la renovable. China controla la práctica totalidad de su extracción y, sobre todo, de su procesamiento, y Donald Trump las ha convertido en un punto clave de la negociación del final de la guerra en Ucrania. En marzo de 2024, Europa las incluyó en la lista de materias primas fundamentales que ha instado a los 27 a explotar a nivel local.

Fuente: www.elmundo.es